La salud y el bienestar son cruciales a lo largo de toda nuestra vida, pero adquieren un valor particular a medida que envejecemos. En la tercera edad, el cuidado integral se convierte en una prioridad. La combinación adecuada de ejercicio físico y estimulación cognitiva es una de las herramientas más poderosas para mantener y mejorar la calidad de vida
El ejercicio físico y la estimulación cognitiva en adultos mayores es más que una rutina, es una necesidad.
El ejercicio es fundamental para la salud integral de los adultos mayores. La actividad física regular puede contrarrestar la tendencia a que las capacidades físicas disminuyan a medida que envejecemos. El ejercicio para adultos mayores tiene muchos beneficios, incluida una mayor movilidad y una reducción del riesgo de enfermedades crónicas. El ejercicio regular, personalizado para las necesidades de los adultos mayores, ayuda a mantener la movilidad y la flexibilidad de las articulaciones. La práctica constante de ejercicio físico en la 3º edad fortalece los músculos y evita la pérdida de masa muscular asociada con el envejecimiento, lo que es fundamental para evitar caídas, lesiones y reducir el riesgo de mortalidad derivado de la sarcopenia.
Cuidar el peso , la diabetes y la sarcopenia en la 3º edad
La tercera edad es un momento común para el aumento de peso, pero el ejercicio regular puede ayudar a controlarlo. Mantener un peso saludable y prevenir enfermedades asociadas, como la diabetes tipo 2, requiere una combinación de ejercicio físico personalizado y una dieta equilibrada. De esta manera también se previene la sarcopenia en la 3º edad, siendo esta una enfermedad muy ligada al deterioro de la funcionalidad y a la mortalidad.
Deterioro cognitivo en la 3º edad
El bienestar de las personas mayores no solo se limita al cuerpo; la mente también es una importante herramienta y mantenerla en un buen estado es fundamental. Conservar la agudeza mental y prevenir el deterioro cognitivo relacionado con la edad requiere de una estimulación cognitiva personalizada para cada una de las características del sujeto. Incluir juegos mentales como rompecabezas, crucigramas o juegos de memoria puede ser tan beneficioso como hacer ejercicio físico siendo la combinación de ambas la mejor herramienta para mejorar la calidad de vida en adultos mayores.
Además de las actividades individuales, la socialización y la participación en la comunidad son esenciales. La soledad es un factor de riesgo para la salud mental en la tercera edad, se reduce manteniendo relaciones sociales y participando en actividades grupales de calidad.
Ejercicio físico y estimulación cognitiva la mejor combinación en la 3º edad
Los beneficios individuales del ejercicio y la estimulación cognitiva se potencian cuando se combinan. Por ejemplo, hacer ejercicio de fuerza en la 3º edad mientras se realiza una actividad mental, como escuchar música o aprender algo nuevo, puede mejorar la concentración y el rendimiento cognitivo. Es esencial adaptar los programas de estimulación cognitiva y de ejercicio físico a las necesidades y capacidades de los adultos mayores. Se pueden crear planes individualizados y seguros consultando con profesionales de la salud como graduados en ciencias de la actividad física y el deporte y terapeutas ocupacionales.
Antes de comenzar con cualquier prescripción de ejercicio físico y estimulación cognitiva en la 3º edad es fundamental realizar una evaluación física y cognitiva, donde podamos observar que facultades son las más deterioradas y por supuesto si existe algún tipo de contraindicación absoluta para realizar ejercicio físico.
La consistencia y la frecuencia a la hora de realizar la prescripción en adultos mayores son fundamentales, siendo la adherencia a la prescripción uno de los principales objetivos en aquellos ancianos que inicien una programación de ejercicio y estimulación cognitiva.
Conclusión: Invertir en ejercicio físico y estimulación cognitiva en la 3º edad
La estimulación cognitiva y el ejercicio físico son esenciales para un envejecimiento saludable y pleno. Al dar prioridad a la salud y el bienestar, no solo se mejora la calidad de vida de las personas mayores, sino que también se fomenta la vitalidad y la independencia. En el camino hacia una vejez activa y satisfactoria, adoptar un enfoque holístico, adaptado a las necesidades individuales, marca la diferencia y puede ser la diferencia entre disfrutar de una vida plena o no. Priorizar el ejercicio y la estimulación cognitiva en la tercera edad es una necesidad para preservar la salud integral y promover un envejecimiento activo y pleno.
Invierte en ejercicio físico y salud.